El sector ecológico andaluz, una posición indiscutible de liderazgo

Según los datos que evidencian, el sector ecológico andaluz genera un valor de producción de unos 700 millones de euros y mantiene alrededor de 42.000 puestos de trabajo. Una posición de indiscutible liderazgo según declaró el consejero de Agricultura, Rodrigo Sánchez Haro en el debate sobre el grado de ejecución del III Plan Andaluz de la Producción Ecológica. Horizonte 2020 en la comisión parlamentaria.

Además ha venido acompañado, de un incremento del número de operadores (agricultores, ganaderos, industrias, etc.) a un ritmo del 10% en los cuatro últimos años para ascender hasta los 14.560. También en este apartado se sitúa Andalucía al frente de las comunidades autónomas, por delante de Castilla-La Mancha (7.128) o Cataluña (3.942), segunda y tercera regiones a nivel nacional, y con Almería como la provincia con más operadores y productores (3.171), seguida de Granada (2.548) y Córdoba (2.072).

Esto es debido al esfuerzo de un sector extraordinariamente dinámico y con una gran vocación de superación, siendo respaldado por el Gobierno andaluz.

Desde que entrara en vigor el I Plan Andaluz de Agricultura Ecológica.  Entre 2002 y 2006, multiplicó por cinco la superficie certificada, desde las 107.000 hasta las 537.000 hectáreas, y elevó la cifra de operadores desde 4.173 hasta 6.550. Un continuo crecimiento que aumento con la segunda edición del programa, entre 2007 y 2013, para dejar un balance de cerca de14.000 operadores y dar un impulso al consumo interno, a los canales de comercialización, a la diversificación de la producción y al desarrollo de la agroindustria ecológica que afianzaron a la comunidad autónoma en la vanguardia.

Según las declaraciones del consejero, lejos de conformamos con eso hemos renovado nuestro compromiso con este modelo productivo. El III Plan Andaluz de la Producción Ecológica, que contempla hasta 40 actuaciones prioritarias, aspira, entre otros objetivos, al desarrollo sostenible de la producción ecológica; al incremento de la competitividad y la proyección comercial; a la mejora de la profesionalización del sector; a una mayor capacidad de respuesta, ante unos consumidores cada vez más exigentes en aspectos ambientales, de calidad y de responsabilidad social; y a la creación de empleo estable y de calidad.

Para ello, el plan, que, integrado en el Programa de Desarrollo Rural (PDR) de Andalucía 2014- 2020, contó con una dotación inicial de 301 millones de euros, ha comprometido ya, “a falta de tres años para su finalización, más de 329 millones de euros. En esta línea, ha destacado la medida de agricultura y ganadería ecológicas (incluyéndose tanto el cambio a nuevas prácticas como el mantenimiento de las ya existentes), con aproximadamente unos 11.000 beneficiarios y 473.000 hectáreas, un 125% del presupuesto inicialmente asignado (189,1 millones). De ellos, además, ya se han abonado 84,6 millones correspondientes a las dos primeras anualidades de unos incentivos que respaldan unos compromisos asumidos por un periodo de cinco años, ha detallado.

Por otro lado, también con un alto compromiso por parte del consejero son las ayudas agroambientales. Con una previsión de 22,7 millones de euros, “ya se han comprometido 26,7 millones (un 117%) y, de ellos, se han pagado 9,7 millones, el 36,2%, correspondientes a los dos ejercicios ya cerrados de unos compromisos que también se alargan durante cinco años. De igual modo, en lo que se refiere a jóvenes instalados en explotaciones ecológicas, de un presupuesto total de 11,5 millones de euros, se han abonado ya 8,48 millones (el 73%) a 269 beneficiarios. Además, el consejero ha puesto el foco en la línea de incentivos a la agroindustria ecológica, orientada a respaldar la transformación, la comercialización y el desarrollo de productos. Con estos fines ya se han comprometido más de 35 millones de euros, sobre una asignación originaria de 25 millones, el 140%.

Sánchez Haro también ha confirmado que la Ley de Agricultura y Ganadería de Andalucía, vendrá a priorizar estos modelos de producción sostenible en un momento crucial para la producción ecológica andaluza en el que el binomio Junta-sector ha demostrado su validez. Queda por tanto aprovechar las oportunidades del uso creciente de las innovaciones tecnológicas, el mayor valor añadido que otorga la internacionalización de las empresas, el crecimiento del mercado mundial de productos ecológicos y la intensificación de los objetivos ambientales en la PAC post 2020.